Es viernes. Hoy, los abogados de nuestros familiares y amigos presos han dado a conocer a la sociedad un nuevo camino para acabar con la dispersión. Y muchos de nosotros, hemos tenido conocimiento de este nuevo paso, en la carretera, a cientos de kilómetros de Euskal Herria o preparando el largo viaje que tenemos por delante.
Conocemos demasiado bien las gasolineras, los rest-stop y los pueblos perdidos de España y Francia. Llevamos más de 25 años viajando hasta donde alejan a nuestros familiares; hasta donde ha hecho falta. 25 años haciendos frente a nuevas vueltas de tuerca, al hielo, a la lluvia o al viento. Más de 25 años con los derechos vulnerados, sistemáticamente cada fin de semana. La dispersión vulnera nuestros derechos pero, vulnera también los derechos de nuestros familiares y amigas presas.
En estos 25 años la dispersión ha provocado 16 víctimas mortales. Cientos de heridos en los siniestros registrados. Unas víctimas a las que se niega el más mínimo reconocimiento. Este año, en 2014, la dispersión ha provocado 10 accidentes y más de 30 personas se han visto involucradas en ellos.
Somos un pueblo pequeño y miles de personas han sido aquí detenidas, torturadas y encarceladas. Un porcentaje muy alto de la población ha sufrido en carne propia esta política de venganza llamada dispersión y somos miles quienes todavía la sufrimos. Miles de personas, para las que en este nuevo contexto político, nada ha cambiado. Miles quienes sufrimos esta violencia. Porque nuestros derechos son los únicos que se siguen vulnerando, constantemente. Porque su ansia de venganza nos obliga todavía a viajar miles de kilómetros cada fin de semana para ver a nuestros seres queridos. Es por ello que entendemos como muy importante la decisión tomada por el Coletivo de Presos Políticos Vascos (EPPK). Muy importante porque tiene como objetivo terminar con la vulneración de derechos humanos continua que supone la dispersión.
Por ello queremos realizar un llamamiento a todos los agentes políticos, sociales y sindicales para que , de una vez por todas hagan todo lo que está en su mano para terminar con la dispersión. Especialmente a los responsables de su puesta en marcha. Del mismo modo que se activó, es hora de ponerle fin. Etxerat quiere subrayar también la urgencia de la situación por la que están atravesando los presos políticos gravemente enfermos. Así, queremos exigir su inmediata puesta en libertad. Porque están gravemente enfermos. Porque tienen derecho.
Es viernes y vamos a salir a las carreteras. Con la tensión, el nerviosismo y el cansancio acumulado. Con los miles de kilómetros que tenemos por delante. De ida. Y de vuelta.
Nunca ha habido derecho para aplicar la dispersión.Hoy en día, tampoco hay excusa.