ETXERAT (17-3-2020). Etxerat quiere hacer pública su adhesión al documento por el que, en el día de ayer, más de 30 organizaciones, entre ellas (entre otras Sare, Salhaketa u Osabideak) solicitaban medidas urgentes al Ministerio de Interior e Instituciones Penitenciarias.
Entendemos que la situación en las cárceles puede llegar a ser muy complicada dadas las muchas carencias y deficiencias que se registran habitualmente en el ámbito penitenciario, tales como el hacinamiento, los servicios y atención médica inadecuada o la permanencia en prisión de personas mayores de 70 años y presos gravemente enfermos. Una situación que, para evitar graves consecuencias necesita de una intervención urgente y eficaz, que tenga como objetivo y prioridad la salud y los derechos de las personas presas. Hacemos extensivo este requerimiento también a las autoridades judiciales y penitenciarias del Estado francés. Queremos recordar que el bloqueo de la fiscalía impide la libertad de algunos presos que se encuentran en los grupos de alto riesgo.
En estos momentos, cuando la salud y la necesidad de preservarla nos llevan a tomar todas las medidas a nuestro alcance, nuestra atención se dirige hacia las personas presas que, no pueden tomarlas por sí mismas y están sujetas a disposiciones y reglamentaciones en las que sus derechos no siempre son prioritarios. Nuestra máxima preocupación, dentro de lo que ya es un colectivo vulnerable, son los presos gravemente enfermos y los mayores de 70 años, sobre quienes se duplica el riesgo y la vulnerabilidad.
Entendemos también que se deben activar medidas que compensen la suspensión de visitas, tal como se expresa en el escrito mencionado, mediante sistemas de videollamadas y la gratuidad de estas comunicaciones para evitar la desconexión familiar o que esta dependa de la disponibilidad económica de cada familia.
Éste es el texto suscrito por las asociaciones:
2.- El incremento de las comunicaciones orales ordinarias a través de locutorios.
3.- La libertad de población preventiva estableciendo otro tipo de controles si fueran necesarios.
4.- Excarcelación de personas con condenas de poca duración.
5.- Cumplimiento del régimen abierto fuera de los establecimientos, con las posibilidades que la normativa penitenciaria prevé (control telemático o de otro tipo).
6.- La gratuidad de llamadas telefónicas extra.
7.- Información a las familias de la situación sanitaria de sus familiares internos de manera lo más rápida y clara posible.
8.- Medidas especiales de control para los funcionarios y trabajadores. Hasta ahora son quienes han dado positivo y quienes pueden ser fuente de contagio al estar en contacto físico con las personas privadas de libertad.
9.- En caso de que se diera algún positivo, procurar que el aislamiento se haga en una instalación médica, no en celda como una sanción.