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Con 4 detenidos se ha saldado el último operativo policial contra la solidaridad y contra la defensa de los derechos de las y los presos vascos, y los nuestros, los de sus familiares y allegados. El anterior operativo policial, ocurrido hace apenas dos meses, dejó el derecho a la asistencia jurídica de nuestros familiares encarcelados, seriamente lesionado. El de ayer, ha querido atacar directamente su derecho a la salud, a la asistencia médica de confianza. La política de venganza del gobierno español, por encima de cualquier otro propósito, continúa golpeando sistematicamente sus derechos humanos.

Esa misma política, la de la venganza, es la que ahora se dirige contra nosotros y nosotras, familiares, allegados, amigos de presas y presos, exiliados y exiliadas políticos vascos. No pueden detenernos por ser familiares, pero pueden hacerlo criminalizando Etxerat, nuestra Asociación. No pueden silenciarnos, pero pueden desacreditar nuestras denuncias deslegitimando Etxerat. Pueden vulnerar nuestros derechos y los de nuestros familiares, y lo hacen, pero no quieren que la sociedad lo sepa.

En las semanas precedentes, signos inequívocos habían anunciado que Etxerat había pasado a ocupar el centro de una diana que antes han ocupado otros colectivos comprometidos con la solidaridad de los represaliados y la defensa de sus derechos. El reciente encuentro con el Lehendakari de la CAV y con grupos parlamentarios europeos, había desatado una campaña politico-mediática de gravísimas acusaciones contra nosotros y nosotras. Y sus consecuencias eran previsibles.

Somos familiares, somos amigos, somos allegados de presas y presos, exiliados y exiliadas políticos vascos y Etxerat es nuestra asociación. Aquí nos organizamos, aquí nos coordinamos, aquí encontramos la ayuda, el apoyo, el asesoramiento, la solidaridad, que nos ayuda a paliar las consecuencias de una política de excepción que no solamente se dirige contra las y los encarcelados sino contra nosotros mismos. Una política de excepción devastadora para cualquier persona que lleva 26 años en marcha buscando nuestro sufrimiento y dolor y cuyo único logro, es que lo consigue. Y a pesar de todo, nuestra energía, nuestra voluntad y nuestro compromiso están con la resolución y la paz. Para que nada de esto se repita nunca más, para que nadie, nunca más, tenga que sufrir lo que estamos sufriendo.

Pero el compromiso con la paz y por la defensa de los derechos de todos y todas, es el escollo con el que choca, de frente, la política de la crueldad y el afán de venganza. Etxerat se ha sumado a esa mayoría social, política y sindical que lucha por abrir vías hacia la paz, y es un escollo para quienes se obcecan en mantenerlas cerradas. Seguimos y seguiremos en este camino. Y seguiremos denunciando cuando tengamos que hacerlo, apelando a la responsabilidad de todos y todas con los derechos humanos, con la resolución, con la paz.

Por todo ello, exigimos la inmediata puesta en libertad de Izaskun, Nagore, Fernando y Oihana.

Para responder ante esto, ayer nos reunimos con diferentes organismos políticos y sociales de Euskal Herria y tras acordar un texto decidimos convocar una MANIFESTACIÓN NACIONAL EL SÁBADO 28 DE MARZO EN DONOSTIA bajo el lema: "POR LA DEFENSA DE LOS DERECHOS DE LOS PRESOS/AS Y SUS FAMILIARES, SOLIDARIDAD!". Saldremos a las 5.00 de la tarde del estadio de Anoeta de Donostia. Lllamamos a toda la sociedad a que acuda en defensa de los derechos y la solidaridad.