ETXERAT (27-6-2021). Familiares, allegados y vecinos y vecinas de Zierbena y alrededores han participado hoy en un sencillo acto de recuerdo y homenaje a José Mari Maruri.
Son ya 23 años desde que Jose Mari Maruri Txitxarro perdiera la vida cuando acudía a visitar a su hijo Lander, entonces en prisión. Han sido muchos años de dolor y sufrimiento, que al igual que las personas que querían a José Mari han padecido igualmente el resto de familiares y gente cercana a las 16 víctimas de la dispersión y el alejamiento que perdieron la vida en la carretera.
Y por eso, es momento de buscar cómo ofrecer a estas personas reconocimiento oficial e institucional y reparación, más allá de iniciativas simbólicas como las mociones aprobadas recientemente, también en Zierbena. La muerte de Jose Mari y del resto deben tener su lugar en el mapa de la memoria porque se podían haber evitado si hubieran prevalecido los derechos humanos y una ley no mantenida sobre la venganza y el castigo añadido.
Queremos mostrar a toda su familia, a Lander, Mariasun, Aizeti y al resto de allegados un abrazo y un beso, todo nuestro cariño, solidaridad y nuestro compromiso para seguir trabajando por el final de la excepcionalidad contra los presos vascos, por la memoria y el futuro.
Jose Mari, siempre estarás en nuestros corazones.