ETXERAT. Texto leído por Jabier Salutregi, hoy en Bilbo, en apoyo a la iniciativa der Etxerat Elkartea.
Hemos acudido hoy a esta comparecencia con la intención de impulsar, como tantos cientos y cientos de ciudadanos y ciudadanas vascas, una iniciativa que nos parece de vital importancia.
En la medida que los gobiernos español y francés mantienen el bloqueo sobre cualquier iniciativa que propicie el acercamiento de los presos a Euskal Herria y la puesta en libertad de los que padecen enfermedades graves, la asociación Etxerat anunció públicamente hace ahora un mes que se va a hacer cargo directamente de la asistencia jurídica y sanitaria de sus familiares presos.
Tal y como sus estatutos lo prevén, Etxerat afronta este reto en base a la necesidad de mitigar las necesidades y gastos derivados de la dispersión y el alejamiento que cargan sobre sus espaldas las familias de los presos políticos vascos. En el camino hacia esa apuesta, Etxerat ya ha realizado encuentros con agentes políticos, sindicales y sociales, con trabajadores, con personas referenciales en el ámbito del deporte y la cultura, con la iglesia para plantearles la importancia de implicarse en esta importante apuesta.
El trabajo no ha acabado, ni mucho menos, y es precisamente lo que queda por hacer lo que hoy hemos venido a promover. Etxerat constata receptividad y respuesta positiva en los contactos mantenidos hasta el momento, y nosotras y nosotros creemos que, en adelante, es importante implicarse en esta apuesta y ayudar a dar otro paso irreversible en el camino hacia la resolución definitiva de las consecuencias del conflicto.
Para seguir avanzando en el camino hacia una sociedad en paz, sin personas presas, exiliadas o deportadas, se requieren acuerdos previos entre agentes políticos, sindicales y sociales, tanto en la CAV, como en Nafarroa e Ipar Euskal Herria. Y junto a ello, para que cualquier acuerdo de este calado pueda también desarrollarse a todos los efectos, es imprescindible una legislación acorde con el nuevo escenario, superando la legislación de excepción creada para un contexto hoy en vías de superación definitiva.
Es fundamental la implicación y la ayuda de un amplio espectro de la sociedad vasca. Eso es lo que pretendemos aportar hoy aquí: que no sólo las personas individuales que estamos aquí y otros cientos más apoyemos esta iniciativa, sino que se extienda a otros colectivos, sectores y personas de nuestro país.
Es el momento de responder a los problemas de salud física y síquica que presentan, así como a la asistencia jurídica que van a requerir los presos vascos.
¡Las y los queremos vivos y en casa!