ETXERAT (4-8-2019).. Más de 2.000 personas se han movilizado a mediodía de hoy en las playas vascas, entre Muskiz y Hendaia. (Muskiz 150; Bakio; Laidatxu 85; Laga 30; Laida; Ea 150; Lekeitio 250; Ondarroa 320; Mutriku; Deba 170; Orio 150; Zarautz; Donostia 200; Hendaia 150).
En las concentraciones se han repartido hojas informativas, acerca de la situación en la que se encuentran los presos políticos vascos y el castigo añadido que continúan sufriendo los familiares.
Éste es el texto de la valoración de la jornada de hoy:
Nuestra presencia hoy en las playas de Euskal Herria, como venimos haciendo desde hace tantos años, pone en evidencia la deuda que el Estado español mantiene con la ciudadanía vasca.
En un tiempo de avanzar, de solucionar, de aportar a la paz, a la convivencia y, en definitiva, al futuro, el Estado español mantiene nuestra situación en los mismos parámetros de castigo añadido, chantaje y venganza que activó contra nosotros, familiares y allegados de presas y presos políticos vascos, hace tres décadas. Un sufrimiento impuesto sobre un sector de la ciudadanía vasca que comprende a cientos de familias, miles de personas, convertidas en víctimas potenciales cada fin de semana.
Tan sólo en lo transcurrido de este año se han producido seis accidentes, con 13 familiares y allegados de presas y presos políticos vascos, entre ellos un bebé de 23 meses afectados. Pero es que, en 30 años de dispersión y alejamiento, el trágico balance es de 344 accidentes de tráfico en el viaje de ida o vuelta a las visitas; 16 víctimas mortales; y 937 personas (entre ellas varios niños), familiares y allegados de un total de 395 presas y presos políticos vascos, afectadas o heridas -en ocasiones de extrema gravedad- en estos accidentes. Y las cifras, prácticamente cada mes, siguen subiendo. Mas accidentes, más sufrimiento.
En las cárceles, nuestros familiares continúan bajo una política penitenciaria de excepción que lleva al límite las condiciones de vida, la salud física y psíquica. Recientemente, Jose Angel Otxoa de Eribe ha sido puesto en libertad condicional debido a una gravísima enfermedad. En los Estados español y francés, otros 20 presos y presas vascas sufren enfermedades graves o incurables que se ven agravadas, aún más si cabe, por las condiciones de vida en prisión.
¿A qué ayuda esta situación? ¿a quién satisface este sufrimiento? ¿qué aporta al escenario de paz y de convivencia por el que tanto está trabajando la sociedad vasca?
No olvidamos tampoco que el próximo 16 de septiembre dará inicio el juicio por el sumario 11/13, en el que 47 ciudadanas y ciudadanos vascos, entre ellos, dos familiares, serán juzgados por su labor de ejercer como portavoces de Etxerat, una labor que en todo momento se ha hecho pública y se ha dado a conocer. Queremos mostrar nuestra solidaridad y apoyo incondicional a los 47 encausados, a sus familias que, en este nuevo escenario, viven la angustia de escenarios que ya deberían haber quedado atrás y, especialmente, a nuestras dos compañeras Izaskun Abaigar y Nagore López de Luzuriaga.
Mantenemos nuestro compromiso para seguir trabajando y defendiendo nuestro derecho a hacerlo, en clave de aportación a la paz y a la convivencia, en clave de resolución y en clave de futuro: que lo que ha ocurrido nunca más vuelva a ocurrir.
¡Las y los queremos vivos y en casa!